Cuatro diferentes formas de trabajar las uñas

No existe un método único y exclusivo para trabajar las uñas, no hay una técnica "correcta" y otra "incorrecta". Existen cuatro corrientes de pensamiento procedentes de distintos países, cada una con su propia visión de la estética y los cánones de belleza. Con el tiempo, las distintas metodologías se han extendido por todo el mundo, dándonos la oportunidad de elegir la que prefiramos. Explore estos métodos con nosotros para encontrar la mejor opción para usted.

Manicura rusa 

Este método de trabajo se denomina manicura en seco precisamente porque cada procedimiento se realiza "en seco", sin utilizar lociones para ablandar la piel y las cutículas. Esto se debe a que la aplicación de cualquier aceite hace que la aplicación del esmalte de uñas de gel o esmalte semipermanente sea algo más difícil, y también reduce su durabilidad. La razón de trabajar "en seco" es empujar las cutículas hacia atrás con más facilidad para extender el color bajo la piel. De este modo, el crecimiento será mucho menos perceptible y el lecho ungueal quedará uniforme y ordenado. Para realizar la manicura rusa, es necesario manejar a la perfección el torno, conocer bien las distintas fresas que hay que utilizar y tener mucho cuidado de no dañar la piel de las clientas. Si esta técnica te apasiona y quieres probarla, te recomendamos que te pongas en contacto con personal cualificado y evites el bricolaje si eres principiante en este campo. Para llevar a cabo esta técnica, es necesario tener un diploma de esteticista, ya que no sólo se tratan las uñas, que pueden ser trabajadas por técnicos manicuristas.

Manicura japonesa (P-shine)

En las dinastías japonesas más importantes, un signo que definía la pertenencia a una clase social alta era el cuidado impecable de la mano en su conjunto. Unas uñas fuertes, sanas y brillantes, sin necesidad de aplicaciones artificiales, era un claro signo de pertenencia a la nobleza. Por el contrario, los campesinos y jornaleros tenían las manos estropeadas por el duro trabajo. La manicura japonesa consiste en cuidar y nutrir la uña con ingredientes naturales, en particular cera de abejas. Este método también se denomina P-shine, precisamente porque una de las prioridades es hacer brillar la uña natural. No se aplican esmaltes en gel ni semipermanentes; el objetivo es fortalecer el lecho ungueal sin utilizar productos con componentes químicos. En Extremo Oriente, incluso utilizan limas recubiertas de gamuza para ser aún menos invasivos. Un lecho ungueal cuidado de este modo brillará de forma natural durante al menos dos semanas, y con el paso del tiempo se volverá más fuerte y sano. ¿Un capricho? Los dedos se masajean durante la sesión para favorecer la circulación sanguínea y hacerle sentir completamente mimado.

Manicura italiana

Italians do it better y es bien conocido. La artista Alexandra Teleki, propietaria de un importante salón en Inglaterra, se enamoró de la manicura italiana, la promovió y difundió entre sus clientas y alumnas. El método consiste en aplicar el esmalte en el borde de la cutícula, sin tocarla para evitar que se corra. Se suele utilizar un empujador de cutículas, pero sin excederse, para no correr el riesgo de dañar o sangrar los dedos. El esmalte de uñas de gel o de esmalte semipermanente se aplica sin tocar los laterales de la placa ungueal, lo que da a una uña incluso más ancha un aspecto más estrecho y alargado. De este modo, incluso los dedos menos afilados parecerán más esbeltos y gráciles, a lo que también contribuyen las formas tendencialmente cuadradas de moda en Italia (rara vez se ven en Italia formas puntiagudas o longitudes extremas). Este estilo se presta bien a la aplicación de capas completas, excelente para los total looks sin el uso de espacios negativos adicionales aparte de los laterales de la uña. Un método que realza cualquier forma y longitud, con la única desventaja de que las uñas vuelven a crecer y es necesario reservar una cita en el salón de manicura.

Manicura brasileña

¿Has tardado años en aprender a aplicar el esmalte de uñas con cuidado y precisión? Olvídalo. La manicura brasileña consiste en aplicar el color de forma totalmente aleatoria, incluso en los dedos. El primer paso consiste en limar la uña para darle la forma deseada, después se empapa la mano en agua tibia para ablandar la piel y se empujan suavemente las cutículas hacia atrás con un palito de madera. Después, se colocan unos guantes empapados en agentes hidratantes y se exfolia la piel durante 15 minutos, para que las células muertas salgan con poco esfuerzo. A continuación, se procede a la aplicación aleatoria de esmalte de uñas normal ( esta técnica no puede realizarse con esmalte semipermanente o gel), sin prestar atención a los bordes. El exceso se elimina con un bastoncillo empapado en disolvente: es importante actuar antes de que se seque el color. ¿El exceso de producto no se retira completamente de las cutículas? No hay problema, se pueden cortar. Es fundamental que la operación la realice un especialista en la materia, no te arriesgues a una hemorragia por querer intentarlo en casa por tu cuenta, confía en un experto.